[Drables ToraxAoi] PERDÓN

23:06 *Mony-san* 0 Comments


Autora: Mony-san
Banda: Alice Nine & the GazettE
Pareja: ToraxAoi
Género: Humor.
Perdón

Ahora que lo recordaba, se suponía que debería de mandar al diablo a aquel maldito que estaba encima de su cuerpo restregándose como si la vida dependiera de ello. Pero es que esos besos eran inevitables de no saborear, esos labios del pelinegro eran simplemente hechizantes, tan suaves, tan rudos y deliciosos que le impedían separarse.

- Déjame respirar… idiota. – regaño.

- No quiero.

Aquellas manos habían ido rápidamente a su pecho, empujándole una vez mas al colchón, adentrándose a su camisa tocando cada parte de su pecho. Se retorcía, ¡demonios! si Tora seguía tocándole asi se olvidaría de que estaba enojado con el. Pero, momento, ¡Aun no lo perdonaba!

- ¡Que me dejes! – y de un movimiento pateo aquellas partes bajas y nobles del otro – T-Tora, ¿estas bien? – Pregunto alarmado al ver el estado fetal del otro sobre la cama – Amor yo no quería… -

- P-Pero… pero lo hiciste… - se quejo.

Aoi no podía estar más preocupado y avergonzado con Tora porque en realidad ya no se podía. Ahora mismo no sabia que hacer, no tenia idea de como comportarse por lo ocasionado. Tora solo se quejaba, solo rodaba por la parte sola del colchón, con los ojos cerrados, con, una mueca en el rostro.

-Y-Yuu, me duele. – volvió a quejarse, abriendo los ojos y mirando al otro. Pudo ver su arrepentimiento en ellos, su escondido “perdón” que estaba seguro trataba de decir. Vio como los ojos del pelirosa comenzaron a cristalizarse, y ahí se dio cuenta de que Aoi si que era voluble. Se acercó despacio recibiendo los brazos que rápidamente rodearon su cuello.

- Perdón… - susurro aferrándose.

- Descuida, fue mi culpa. Yo no quise detenerme cuando me lo pedias.

- ¿No estas enojado?

- No puedo enojarme contigo, cariño. – sonrió leve, acomodo los mechones rosas del otro dándole un fugas beso a sus labios - Ya tonto, no pasa nada. -

- Idiota…

- Pero asi me amas…

Aoi sonrió haciendo un puchero gracioso, besando despacio los labios ajenos antes de que sus lenguas pelearan dentro de su cavidad bucal. Sabia que se había pasado y que había sido algo rudo pero, se lo merecía, todo porque siempre le jodia con lo del perfume que le habían regalado, con las malditas “travesuras” que siempre le hacia y ahora por hacerle comportarse de esta manera, pero no importaba porque así le quería, porque así al igual que Tora, podía ganarse una de las mejores noches de la semana.


Gracias por siempre leerme...

0 comentarios: