Vampire Love ~Capitulo 9~

18:25 *Mony-san* 0 Comments

CAPITULO 9
“Comenzando con el plan…”

¿Uruha lo tenía? Como era posible que él lo tuviera si solo hacia tan poco tiempo que Saga había escapado, Pero porque? Porque Saga no lo dejo explicarse mejor, porque no le dio el tiempo de decirle que no había sido él sino su rabia al no haberlo podido tener, al no podido controlar su hambre y ese maldito instinto asesino.

Camino lo más rápido que pudo junto a Shou, caminando hasta las afueras justo donde este se había encontrado con el rubio, observando con detenimiento como Reita esperaba recargado en un árbol mirando la luna, esperando pacientemente.

Shou sonrió y Tora se puso en guardia.

- No tengo intenciones de pelear contigo, Tora – giro para mirarle extendiendo una mano hacia Shou para que se acercara – Parece ser que Shou no te conto nada… -

- Que es lo que no me conto? – alzo un ceja – ¿crees que yo te voy a creer? –

- No es cuestión de creer o no, yo no creo tampoco en nada ni en nadie… ni en el mismo Uruha – contesto sereno – Yo solo le prometí a Shou que los llevaría y eso are, no lo hago por ti, sino por él –

Esta vez al terminar Reita con su comentario apunto a Shou, jalándolo para abrazarle mirando con aquella sonrisa socarrona a Tora, aquella que el mismo pelinegro odiaba. Pero, que sucedía con esos dos, Tora sabía muy bien los sentimientos de Shou pero nunca supo los de Reita y pensaba que este se aprovechaba de ellos para poder manejarlo, entonces, si eso era asi, porque los veía tan unidos, porque Shou no le llamaba Reita como debería de ser?

No entendía, pero tampoco le importaba. Lo único importante para él  era Saga.

- Confiemos en él, Tora… si algo sucede yo me are responsable…

- No es eso Shou, no es cuestión de que alguien se haga responsable o no, por mi puede mentirnos pero sabes cuales serían las consecuencias… Si él me engaña, lo mato.

- Como sea, si no te apuras amanecerá…

Reita rodo los ojos, sabia y le daban ganas de tener una pequeña pelea con Tora, todos los que los conocían hablaban de él afirmando su sangre fría, su manera tan brutal de matar, y eso de cierta forma excitaba al rubio. Pero Shou, ahora su prioridad era él, ahora no podía divertirse tanto sabiendo que de alguna manera le haría preocuparse.

Pero si para no preocuparle tenia que ayudar a Tora, lo haría con gusto, ayudaría en lo que fuera necesario con tal de también ver hundido a Uruha, amigos o no, Reita haría lo que era su propia conveniencia. Era traicionero… solo con el castaño.

- Akira… tenemos que sacarlo antes de que salga el sol.

- Lo se Shou… – lo jalo para abrazarlo - solo déjenmelo a mi, es tan fácil convencer a Uruha cuando se le conoce –

- No confió para nada en ti. – Tora seguía con la misma actitud.

- Ni pido que lo hagas, ¿nos vamos?

Tora a querer o no, lo siguió, siguió a aquellos que prácticamente para los humanos corrían pero para un simple vampiro solo eran pequeños pasos, salieron a las afueras de la ciudad encontrándose con una casa bastante grande, una tal vez mas grande que la del propio Tora, aquella que tenia una fachada algo antañera, una que tenia siglos sin poder caer. Ahora entendía el porque

Reita se detuvo justo antes de llegar a la puerta y señalo una ventana a lo alto.

- Escucha con atención, Tora – advirtió – Tu olor es insoportable y Uruha te descubrirá, quiero que entres a esa habitación, y esperes ahí.

- Me estas diciendo que yo ape…

- ¡TORA! No es hora para pelear, ve a donde te dijo Reita yo te alcanzare… - dijo Shou y el pelinegro gruño.

- Eso no se va a poder. – Intervino el rubio – Tu no te separas de mi, no sabemos si Uruha ya sabe que estamos aquí… Shou tu vienes conmigo y será mas fácil engañarlo.

- Pero…

- Esta bien Shou – hablo Tora – ve con él y yo esperare a que ustedes regresen, no tenemos tiempo.

Reita asintió llevándose a Shou al interior de la gran casa, Tora se había quedado por un momento visualizando la situación. Era mejor que Reita no hiciera algo estúpido porque lamentaría que Shou se quedara sin un compañero y hasta lamentaría tener que terminar con su propio amigo si este interfería.

De un brinco llego a aquella ventana.

………………………………………………….......
Saga había seguido a Uruha, habían llegado a una casa muy grande, bastante para su gusto. Cuando entraron se quedo sorprendido por todo lo que había a su alrededor, todo era en un toque Aristócrata, todo era bastante elegante, tanto que no podía creer que alguien tuviera ese tipo de gustos en estos años.

- ¿Te gusta? – pregunto de la nada sorprendiéndole un poco. – A él le encantaban este tipo de cosas… -

- ¿Él?…

- Si, aquel quien me quito Tora… él era un humano, no me atrevía a convertirlo, era tan especial para mí…

- Es por eso que…

- Si, Tora pagara por todo eso… - Sonrió amargamente – Pero Takashi, no estamos aquí para platicarte algo que no debería de importarte. – Uruha camino hacia una sala grande palmeando a su lado – Lo único que importa es que yo te ayudare, y tu me ayudaras, Tora debe pagar por lo que hizo, además de que tu te quedaras conmigo, ¿verdad?...

Como mentirle, no podía decirle que si porque en verdad no quería eso, a pesar de todo aquello que había hecho Tora seguía siendo suyo, y juro, se juro nunca dejarlo porque… lo amaba, porque Tora al igual que él se necesitaban, porque de alguna manera ambos se había tomado un cariño sorprendente, ambos habían estado juntos, y Saga lo necesitaba una vez mas.

Pero Uruha lo saco de sus pensamientos, se había abrazado a su cintura mientras que con su lengua recorría su cuello. Uruha se estaba extasiando de aquel aroma aun humano que Saga transmitía, a pesar de su transformación aquel olor era difícil de desaparecer. Pero justo cuando iba a clavar sus caninos Saga le detuvo.

- No lo hagas… - Uruha lo miro molesto.

- ¿Acaso no quieres estar conmigo? Saga… Tu eres el único que puede ayudarme, eres el único al quien escogí…

- Pero… Tora él…

- ¡TORA NO TIENE NADA QUE VER YA CONTIGO!

- ¡Él me convirtió!

- ¡Puedo revertirlo!… solo tómame, bebe de mi sangre.

- No puedo….

- ¡LARGATE A DORMIR ENTONCES! Me frustras… ¡LARGO! – Grito Furioso – ¡TU donde demonios estabas Imbécil!

En ese momento Saga vio como el rubio tomaba la mano del que se suponía era amigo de Tora. No creía que este lo hubiera traicionado, que hubiera preferido seguir al otro solo para que Tora estuviera solo. Pero un momento, ¿porque se preocupaba de aquel asesino? ¿porque se preocupada de Tora? Se lo merecía, se merecía pudrirse solo, solo como la basura que era.

Aun asi, en el fondo estaba preocupado…

- Tenía cosas que hacer, no eres el único que puede salir a buscar carne. – contesto.

- Entonces ibas enserio con ese… ¿niño? – Aquel gesto de asco hizo enojar a Shou.

- ¡Oye! – Grito ofendido pero Reita apretó su mano.

- No eres el único que puede divertirse, Uruha. – Reita tomo a Shou por la cintura acercándose a él y abrazándolo susurro algo a su oído, algo que solamente el mismo Shou escucho. – Si me disculpas, nosotros nos vamos. –

- Tu que esperas aquí ¡Lárgate hasta que cambies de opinión!

Uruha le había gritado a Saga,  había apuntado hacia aquellas grandes escaleras ordenándole que se fuera, que buscara cualquier cuarto con tal de que desapareciera de su vista. Estaba colérico, como era posible que Saga se resistiera, que le evitara, que le descartara un pedimento a “Vamos a acostarnos” porque eso era, Uruha quería eso, solamente asi –según él- Saga seria suyo y Tora perdería.

En el momento de que Reita observo como Saga miraba hacia todos lados sonrió, Uruha se había quedado sentado con las piernas cruzadas tragándose su coraje, y entonces esta era su oportunidad, esta era la oportunidad de por lo menos ayudarle a escapar.

Pero no había tiempo, el sol estaba a tan solo minutos de salir y Tora estaba encerrado.

- Te llevare a alguna habitación – dijo Reita sintiendo la mirada de Uruha a sus espaldas escuchando todo – Y te quedaras ahí hasta que Uruha te permita salir. –

- Pero…

- Yo no repito las cosas dos veces – Reita a pesar de hablarle serio tenia una sonrisa en su rostro – Sígueme… -

En ese momento Uruha se dejo caer en el grande sofá, mirando como los otros tres subían las escaleras y se perdían en las penumbras. Reita aprovecho para incomodar un poco mas a Shou, lo había abrazado por la espalda recargando su mentón a su hombro mientras caminaban, podía sentir la mirada de Saga pero aun asi este no era capaz de producir alguna palabra.

- Saga… ¿estas bien? – pregunto.

- No creo que ahora te importe…

- No estamos en tu contra – hablo el rubio – Tu no puedes seguir con Uruha, yo solo te ayudare a salir de aquí, tu no perteneces al ambiente de Uruha – asi de simple era.

- Porque me ayudarías, además yo no me quiero ir…

- No te ayudo porque quiera, te ayudo por Kohara, además, de que me es interesante ver a Tora en acción.

- ¡Tora que tiene que ver con esto!

- Si vuelves a gritar hazte a la idea que de aquí sales muerto.

Saga trago saliva, aquel rostro enfadado del rubio le había asustado, estaba totalmente intimidado, sorprendiéndose del porque Shou no había ni siquiera saltado de sorpresa al casi haberlo dicho cerca de su oído. Lo que no entendía era que hacia Shou con Reita y porque aquel cariño entre ambos, porque se veían tan bien juntos.

- Perdónalo… - dijo de la nada Shou – él es diferente, no puede controlarse, no es como nosotros… -

- No sé de que hablas y no me importa – contesto Saga.

- Él no entenderá hasta que el mismo Tora lo explique – Reita intervino – no insistas y ahora, entra en esa habitación y no se te ocurra salir, si es que no quieres morir calcinado a causa del sol –

Saga obedeció, no quería llevarle la contraria a al rubio, aquellos ojos rojo de verdad le intimidaban y cada que escuchaba muerte era tan parecido a las palabras de Tora, lo decían con aquel fervor de felicidad que simplemente a él no le gustaba. Asustándose de sobre manera cuando alguien le jalaba dentro de la habitación.

- No me vuelvas a asustar de esta manera… no te vayas.

- ¿Tora? - Pero antes de decir o recibir una respuesta, sus labios fueron atrapado por los del otro en aquella habitación completamente en penumbras.





Gracias por siempre leerme...

0 comentarios: