[Drabble KenzoxYumehito] The end...

22:30 *Mony-san* 0 Comments

— Lo dejaría todo por ti…

Le tenía perfectamente bajo su cuerpo. Aquella camisa blanca en rayas completamente desabrochada. Su piel era tan blanca, nívea. Aun no creía todo aquello que el castaño pronunciaba, incluso ahora, estaba sin poder entender como era que con tanta seguridad el más bajo decía aquellas palabras. Era claro para el baterista que todo lo que decía Yumehito no era para nada mentira, su seriedad se podía apreciar claramente.

Había detenido sus caricias pero más que eso, había incluso por la sorpresa tener una erección sumamente veloz. Las mejillas rosas del más bajo le provocaban miles de cosas, pero gracias al shock no podía reaccionar.

— Y-Yume…

— Si tú te vas yo lo haré, no tiene sentido se…

— No. — Le detuvo cubriendo sus labios con uno de sus dedos — Hacer música es lo que más anhelas. — trato de explicar más sin en cambio el otro negaba.

— Si no es contigo, no lo haré.

— Eres tan caprichoso. — Dejo de lado la sensación en su entrepierna y simplemente tomo asiento en la cama.

Para Yume era difícil expresar lo que en realidad quería decir, sus palabras no eran para nada claras. No precisamente porque KENZO le abandonaría sino que, sus palabras habían sido el que necesitaba más tiempo para su vida privada que para la música, aunque por obvias razones, entre la “vida privada” del batero estaba el castaño. Algo que el vocal nunca iba a entender. Tratar de sobornar al baterista con ese tipo de comportamientos, vaya que funcionaban.

Y para KENZO era difícil. Él ya había anunciado públicamente que se dedicaría solamente a vivir la vida sin nada de música, pero, ¿acaso era en verdad eso lo que quería? Sabía que las cosas con AYABIE ya eran algo sin arreglo, sin alguna pizca de poder acabar con los malentendidos entre todos.

— No puedo regresar con ustedes. — Dijo de repente para sorpresa del vocalista — Pero, puedo seguir haciendo música. —

Los ojos de Yumehito se iluminaron mientras una enorme sonrisa adornaba sus labios. Recibió aquel beso gustoso, uno como los que le encantaba, que le hacían delirar o simplemente perder la razón de sí. KENZO sabia como volverle loco y como tocarle para terminar entre sus brazos. Sin prenda alguna, sin incluso alguna sabana entre sus cuerpos siguieron hundiéndose en ese placentero sentimiento el uno del otro.

Las manos de ambos moviéndose al compás de los crujidos en la cama, entre jadeos que como melodía entraba en sus oídos para jugar con su mente. Miles de sensaciones eran las que siempre, al hacer el amor, les llenaban por completo

— Sigue cantando para mí, Yume.

— Siempre lo he hecho…

Un beso tras otro, miles de palabras en susurros. Sus deseos serian concedidos poco a poco. Estaba claro que para ninguno esto era una despedía, estaban juntos, si, pero la lejanía entre el ambiente musical sería demasiado distante. Mas sin en cambio ninguno se imaginaria que ambos, volverían a cruzar caminos.

F I N